*Declaración de la Coordinadora de Organizaciones y Movimientos Populares de Argentina (COMPA)
La iniciativa de impedir la oferta de prostitución prohibiendo el rubro 59 en los medios de comunicación gráficos es, claro, una medida positiva, PERO NO ES MAGICA. No salió de la galera de gestos progresistas de la presidenta, que sigue ocultando, en su discurso, las luchas, las continuidades, las historias de sufrimientos y resistencia de las mujeres, que ha producido este sistema capitalista y patriarcal. Constituye un gesto, un paso, necesario pero insuficiente y limitado que descontextualizado no da respuestas a la problemática ni afecta realmente los intereses de los tratantes y sus cómplices.
Hace muchos años que desde el movimiento de mujeres y el movimiento feminista de Argentina venimos denunciando que la oferta de prostitución es parte de un negocio millonario que lucra con el cuerpo de las mujeres. Históricamente planteamos además, que la prostitución tiene a la trata de mujeres como trasfondo y que constituye una forma de violencia, que, en Argentina (sólo considerando cifras oficiales), se llevó en los últimos 18 meses a 600 niñas y mujeres.
Consideramos que hace falta decisión política y políticas públicas a fondo para: perseguir y condenar a los proxenetas, tratantes y todos sus cómplices policiales, judiciales y políticos; cerrar los prostíbulos, liberar a las secuestradas, evitar que más mujeres y niñas sigan desapareciendo y contribuir a que las mujeres en situación de prostitución puedan ganarse la vida de otra manera.
Las organizaciones sociales venimos denunciando los agujeros negros de la ley sobre Trata aprobada en el 2008, que parece diseñada para evitar condenas e investigaciones profundas. Por eso planteamos la necesidad de pasar de los gestos (simpáticos y correctos) a una legislación seria, que no atempere penas o reclame pruebas ridículas para condenar a un apropiador.
Por eso decimos que una golondrina no hace un verano
Prohibir la oferta en los medios no soluciona el problema de la trata de mujeres, no disminuirá la prostitución y no resolverá los problemas de las mujeres en situación de prostitución. Porque la oferta se sostiene con una creciente demanda, y hay formas, mafiosas, grandes negocios, clientes, proxenetas, precarización de la vida, un sistema capitalista-patriarcal que avala esta discriminación, para continuar.
La dimensión del problema es enorme; la trata sigue la ruta del capitalismo, de modelos de exclusión, de modelos que no respetan la soberanía popular; de las soberanías sobre los territorios, sobre los bienes comunes, sobre la naturaleza, sobre el cuerpo de las personas.
Por eso, estos gestos importantes, positivos, que legalizan y masifican el problema siempre son insuficientes, porque hay mucho dolor, muchas injusticias, muchos sufrimientos.
Queremos un mundo, una sociedad donde el buen vivir” sea nuestro presente y nuestro futuro.
Vamos por más, queremos más, queremos una vida libre de violencias, de trata, de prostitución forzada, de ser objetos sexuales, de propagandas discriminatorias. Por todo esto seguiremos trabajando, exigiendo, gritando.
Seguiremos luchando hasta que todos y todas seamos libres!!!
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